Estos días hemos estado por Alemania, para más datos en la feria internacional de Prowine, Dusseldorf. Esta probablemente sea la feria de vinos más importante del sector. Existen otras ferias internacionales también importantes como la London Wine, en Londres, Vinexpo en Bordeaux o Vinitaly en Verona y por supuesto Alimentaria en Barcelona. Pero la feria que probablemente más ha crecido en importancia cualitativa y cuantitativa como volumen de negocio sea Prowine.
La verdad es que cuando llegas a una feria de este tipo (y yo algo de experiencia tengo en ellas), te sientes como Paco Martinez Soria en “La Ciudad no es para mi” es una sensación rara, hasta que te aclaras que metro hay que coger, por que puerta debes entrar para llegar al stand…Pero bueno, hemos sobrevivido.
La segunda sensación que percibes cuando estás por allí, es una sensación de humildad dado que no sé como somos capaces de vender una botella de vino, con la de miles de bodegas y marcas que de todas las partes del mundo están allí representadas.
Pasadas todas esas sensaciones y una vez situado en tu stand, comienza el verdadero trabajo. Trabajo comercial y técnico al mismo tiempo. A los clientes y luego amigos en muchos casos, le gusta compartir sus sensaciones de marca y de cata con el enólogo, yo mismo. Y eso es bueno, muy bueno puesto que me permite transmitir de primera mano lo que intento hacer con nuestros vinos y me permite también recibir la información y sensaciones que se perciben al catarlos.
Como resumen final de la feria he de deciros que los vinos han encantado y eso es muy bueno y nos anima a seguir con el proyecto adelante. Garnachas “al poder”
Adelante siempre con calidad y buenos vinos.
salud.